Recopilamos a continuación algunas dinámicas de presentación o de distensión para el Tiempo libre.
Tu nombre en balleno: Se trata de hacer una ronda de nombres para conocernos. Después cada uno tendrá que repetir nuevamente su nombre, pero en un idioma animal, el que prefieran, o todos en el idioma balleno, que sería combinando sonidos muy graves con otros muy agudos, y alargando mucho las vocales. La diversión está asegurada.
Esta dinámica nos permite conocer los nombres y también romper el hielo, dando vía libre a proponer en el grupo cualquier tontería, sin miedo a que no sea aceptada, de cara a las futuras intervenciones más provechosas.
El lavacoches: En esta dinámica vamos a hacer dos líneas formadas por los participantes creando un pasillo delgado entre las dos, y estos van a mirar hacia el interior del pasillo, de tal forma que los que forman una línea estarán de cara hacia los que forman la otra línea. El pasillo será el lavacoches, y uno a uno los componentes de las líneas abandonarán su función para pasar por en medio del pasillo, es decir, se convertirán en coches que atravesarán el lavacoches para colocarse finalmente de nuevo en la línea, y volver a ser parte del lavacoches.
Los que forman el lavacoches harán distintas funciones, según en qué tramo se encuentren. Los del primer tramo serán el agua, y por lo tanto imitarán el salpicado del agua en los coches que pasen, golpeándoles con los dedos como si fueran gotas. En el segundo tramo se enjabonan los coches, y los que están en la línea frotarán a los coches que pasan. Por último está el secado, y los miembros de la línea soplarán y agitarán las manos para secar el coche.
Esta dinámica es de distensión y confianza, fuerza a la unión del grupo por lo que a su vez crea tensión y cierto malestar que, al provocarse a modo de juego nos permite superar barreras y romper el hielo.
Somos una máquina: Todos colocados en círculo, el primero comenzará a realizar un sonido monótono y un gesto repetitivo. A continuación se incorpora el siguiente, y así sucesivamente hasta que todo el grupo esté repitiendo su sonido y su gesto. Las incorporaciones deben hacerse siguiendo el mismo ritmo que el primero que empezó.
Nos fijamos en la importancia de la unidad del grupo ya que cada sonido y gesto por separado no tiene sentido, pero la armonía permite crear un conjunto sonoro cuanto menos impactante, y con los gestos rompemos el hielo al ver quién hace la mayor tontería.
Hola me gusta esto…: En círculo, uno a uno los participantes salen al centro, se presentan y dicen algo que les guste, un hobby, un deporte, instrumento,… A continuación representan por mímica eso que ha dicho que le gusta, y todo el que le guste también eso deberá representarlo igualmente por mímica.
Con esta dinámica compartimos al grupo algo que nos gusta, que es fundamental como actividad de inicio. Pero además estamos descubriendo nuestras semejanzas dentro del grupo, lo que permite una mayor integración inicial.