La
Casa Roja fue una de las más antiguas ciudades estado junto a la Casa Azul, de
ahí el enfrentamiento entre ambas. Su asentamiento era la antigua Grecia, y fue
la promotora de los grandes juegos que celebraban y que luego trasladaron y
adaptaron a la Escuela, juegos que fueron modificados por la Casa Azul y que,
desde la fusión de las seis casas, constituyó el verdadero enfrentamiento entre
estas.

La
Casa Roja adoptó este color por ser el símbolo de lo que une a todo ser vivo:
el calor, o la vida, que según la creencia de este pueblo, era lo mismo, y todo
estaba hecho de calor. Pero había una triple escisión ya desde los inicios de
la Casa: los que creían que lo que unía a todos era el Sol, los que creían que
era el fuego, y los que creían que era la sangre, tres teorías sobre lo que se pensaba eran tres fuentes de calor, es decir, de vida.

Aunque
unidos por un mismo concepto y misma Casa, estos tres grupos mantuvieron
diferencias y algunos estudios afirman que la escisión se ha mantenido hasta
nuestros días.
Pero
siempre se han movido como una sola Casa, que a lo largo de la historia ha sido
muy activa y guerrera, muy viva, muy llena de calor, y llena del vínculo entre
todos los seres vivos, eso que consideraban el verdadero motor que mueve el
mundo.

Blasones
famosos de esta Casa han sido por supuesto el Lobo, el Ratón o el Cormorán, o
también el León marino en el famoso campamento de 1492 en alianza con la Casa
Verde, aquel en el que organizaron una excursión náutica un tanto accidentada.
Otros blasones de Equipos importantes fueron el del Zorro, el Lirón careto
junto a la Casa Amarilla, el Delfín, el Equipo Hipocampo con la Casa Morada o
Canguro con la Casa Rosa.

Es
posiblemente una de las Casas que más intenta acertar a la hora de establecer
alianzas, y elegir un blasón lo más correcto posible, quizás por su fama de
tener astucia o por la habilidad de analizar las “reglas del juego”. Y en la
elección de blasones se aprecian ambas características.

A
lo largo de la historia muchos personajes de esta Casa fueron más famosos por
sus estrategias que fiereza, de ahí que muchos pasaran desapercibidos, al igual
que su obra. Sin embargo muchos otros, de una de las tres escisiones y algo más
radicales, han protagonizado historias más salvajes al intentar cambiar las
reglas del juego en el que estamos todos, reglas que para la fusión de Casas,
la Escuela, son intocables.

La
Casa Roja se saluda con un apretón de los antebrazos izquierdos: con el brazo y
no con la mano simbolizando un rayo del sol, envolviendo el antebrazo como una
llama, y con el brazo izquierdo por su cercanía al corazón.