Tipología: Juego de percepción, de orientación.
Objetivo: Fomentar habilidades de orientación y la
orientación, y la concepción espacial. El desarrollo físico y el trabajo en
equipo
.
Objetivo
ambientado
: Gana el equipo
que descifre antes el mensaje completo del Loco Migueloqui, el ermitaño de la montaña.
Hablamos de un recorrido de orientación de punto a punto, y en cada uno de estos encontrarán una parte del mensaje final. El Loco
Migueloqui puede pasearse por el marco de juego, molestando debido a su locura. También otras ambientaciones.
Preparación:
Se establece el mensaje y
se divide en partes. Cada parte irá en una zona del marco de juego. Se coloca
junto a cada parte del mensaje las claves para llegar hasta la zona que le
sigue según el orden del mensaje. Se reúnen a los participantes y se les da el
material necesario y las claves para llegar a la primera zona.  
Desarrollo: Los participantes realizarán un recorrido
de punto a punto, obteniendo en cada uno una parte del mensaje, y la información
para llegar hasta el siguiente. Esta información será topográfica: los
participantes deberán orientarse con mapa y brújula para llegar a los distintos
puntos de su recorrido, y en el orden correcto.
Posibles formas de orientación: por pasos, por puntos cardinales, por rastros (señales) dejadas en el suelo, por grados azimut,…
Podemos añadir acertijos o pruebas para superar uno de los puntos con los que se encuentra cada equipo, y obtener así la parte del mensaje, o la indicación para el siguiente punto.
Expansión: Dificultando el juego de orientación, podemos añadir
una variante en el que dentro del recorrido haya personajes que dificulten y faciliten la labor de
los equipos. En otra variante, uno de los equipos participantes puede ser el que vaya colocando las pistas que el otro equipo debe seguir.