Me gustaría empezar la entrad de hoy con una palabras de Albert Einstein que nos llevan a la necesidad de reflexionar acerca de la tarea de los que trabajamos en el ámbito de la enseñanza no formal.

Lo primero debería ser siempre desarrollar la capacidad general para el pensamiento y el juicio independiente, y no la adquisición de conocimientos especializado.
No basta con enseñar a una persona una especialidad, aunque esto puede convertirlo en una máquina útil, no tendrá una personalidad armoniosa y desarrollada.
Es esencial que el educando adquiera una comprensión de los valores y una profunda afinidad hacia ellos. De otro modo, con la especialización de sus conocimientos, más parecería un perro bien adiestrado que una persona de armonioso desarrollo.
Debe aprender las motivaciones de los seres humanos, sus ilusiones y sus sufrimientos, para lograr una relación adecuada con su prójimo y con la comunidad.
Estas cosas preciosas se trasmiten a las generaciones más jóvenes mediante el contacto personal con los que enseñan, no a través de los libros de texto (al menos al principio).
La enseñanza debería ser de tal naturaleza que lo que se ofreciese se recibiera como un don valioso y no como un penoso deber. 

ALBERT EINSTEIN 

 La entrada de hoy está dedicada a los juegos de campamento. Este tipo de actividad nos ayuda a dar ambientación a la actividad planificada y a conseguir objetivos relacionados con el largo plazo, la organización de tareas, la constacia y perseverancia.

Etimológicamente, la palabra juego proviene del vocablo latino “iocus”, que viene a significar diversión, gracia, broma, pasatiempo… Es una fuente de placer, divertida, que generalmente suscita excitación, a la vez que es una experiencia liberadora. De la misma manera, la palabra jugar (Lat. iocari)viene a significar hacer algo con alegría y con el solo fin de entretenerse o divertirse.
Por supuesto y como todos los juegos sirven para refozar ciertos conceptos generales: normas de comportamiento, conocimiento entre los distintos participantes, trabajo de la concepción de uno mismo…


En este caso dividiremos los juegos atendiendo a la complejidad y para ello nos serviremos de algunas web y blogs que consideramos interesantes. Dividiremos los juegos en los siguientes niveles: sencillos, intermedios y complejos.

  • Juegos sencillos 

Se trata de una categoría de juegos de fácil desarrollo. Son juegos para momentos concretos de una actividad y que sean sencillos no quiere decir que no se puedan realizar con participantes de una edad algo más avanzada. Suelen ser juegos populares, algunos muy antiguos y que seguro ya conoceis: La ganillita ciega, El pañuelito, Las películas y otros que podemos encontrar en el siguiente enlace de la página Campamentum y el sitio Dinámicas de grupo

  • Juegos intermedios

Una colección de juegos que puede resultar interesante utilizar en una fase ya avanzada de la actividad de tiempo libre que estemos desarrollando. Aquí podríamos hacer una clasificación muy extensa en función del tipo de juego: sensoriales, de conocimiento, cooperativos, de orientación, físicos, con material alternativo, populares, de orientación, etc… Por ellos os dejamos esta web que contiene recursos muy bien clasificados y cada uno de ellos con un documento que explica a la perfección el desarrollo del juego.  

  • Grandes juegos

Los grandes juegos nos permiten utilizarlos para hilar actividades más largas como campamentos o convivencias. Son juegos especiales que requieren de un tiempo de explicación considereable y por tanto dicha explicación debe estar planificada e integrada en el horario. En este tipo de juego es de vital importancia la ambientación y la decoración, los difraces, carteles, materiales que hagan de su puesta en marcha todo un éxito en nuestras actividades. En la web de Recursos para animadores hay una gran variedad y cantidad de los mismo.

Un programa bien planteado debería integrar todos los tipos de juegos (siempre que la duración de la actividad nos lo permita) para crear espacios que nos ayuden a trabajar el corto y el largo plazo.

El juego es un elemento básico para que el niño/a afronte con éxito las diferentes situaciones que se le presenten en su relación y vivencia personales. Además, requiere una autosuperación personal para desenvolverse en diferentes circunstancias y situaciones de forma satisfactoria y placentera.

La acción de jugar es por tanto un buen entrenamiento para las  habilidades sociales y no sólo un elemento lúdico. El juego ayuda a  desarrollar de forma lúdica la expresión y la comunicación en el niño/a, tanto la verbal como la gestual o corporal. Y no olvidemos que la comunicación es un elemento necesario e imprescindible para la convivencia con los y las demás.

Nosotros como monitores de tiempo libre tenemos que aprender a programar los juegos en función de los objetivos que queremos desarrollar. En nuestro curso de monitor podrás aprender a hacerlo al mismo tiempo que aprendes mucho más recursos para tu labor como animador.